Han pasado veinte años desde que LCD Soundsystem pisó por primera vez un escenario portugués: ocurrió en el festival Paredes de Coura en 2004. Desde entonces, han editado cuatro álbumes (dos de ellos, “LCD Soundsystem” y “Sound of Silver”, marcados el independiente de la década de los ceros), anunciaron su fin con un último concierto en el Madison Square Garden de Nueva York, regresaron unos años más tarde para un nuevo álbum y una gira, hicieron un paréntesis y regresaron a los escenarios. La imprevisibilidad parece ser la fuerza motriz de James Murphy, el hombre al mando de una máquina de ritmos funk, disco, casa y cualquier otra cosa que haya para mover las caderas.